¿Te has preparado una lista de propósitos para el 2013?
Tengo un sistema que te puede ayudar a conseguirlos.
Hace unos días escuché en el programa de radio El món de RAC1 a Lluís Soldevila explicar un plan de acción para lograr tus objetivos en sólo 100 días. Su método es simple y eficaz, ¿te atreves?
¿Quién es Luis Soldevila?
Lluís Soldevila es consultor de empresas, formador y conferenciante. Su sistema de trabajo para la consecución de objetivos es clara: Trata de trasladar las metodologías que utilizan las empresas para conseguir sus objetivos al ámbito personal, para lograr incrementar con ello el rendimiento de equipos y organizaciones.
¿Cómo funciona?
La metodología que propone Lluís Soldevila está basada en los siguientes puntos:
1. Tiempo límite: 100 días. En política los 100 primeros días del nuevo gobierno son cruciales para dar confianza al pueblo, para demostrar su convicción y capacidad de sacar la situación adelante. En tu caso, la idea es que te comprometas con tu objetivo y te propongas, en ese mismo periodo de tiempo, avanzar hacia tu propósito.
2. Los objetivos de uno en uno. Si el día 1 de enero quieres cambiar por completo tu vida, no lo conseguirás. Tendrás tantos frentes abiertos y requerirán de tanto esfuerzo por tu parte, que te agobiará y no podrás avanzar.
Solución: Céntrate sólo un objetivo. Escoge el que quieras, el que creas que es más importante para ti. Si no tienes trabajo, seguramente tu propósito Nº1 será encontrar uno.
Recomendación: Si no sabes cual escoger, empieza por el más asequible. Cuando lo hayas conseguido, tendrás un plus de motivación que te permitirá encarar los siguientes con más optimismo.
3. Definición clara del objetivo con el método SMART.
¿Tienes realmente claro dónde quieres llegar? Para tener éxito en esta misión es necesario que definas correctamente tu meta y para ello no hay nada mejor que definir las 5 características que debe tener un buen objetivo, lo que se conoce como la regla SMART (inteligente). Según este principio un objetivo debe ser:
- Específico:
Ha de ser un objetivo concreto. Algo que puedas identificar claramente cuando lo logres. De no ser así, nunca lo conseguirás. Olvídate de propósitos como: «Ser feliz», «quiero adelgazar», «pasar más tiempo con tu familia».
- Medible
Como explicaba antes, debes reconocer el éxito. Tienes que ser preciso, vincular tu objetivo a una cifra. No es lo mismo “quiero adelgazar” que “quiero perder 10 Kg”. Cuando tengas la cifra en tu mente, será más fácil ver tu evolución.
- Alcanzable Ha de ser un objetivo realista. No debes definirte metas inalcanzables, eso sólo te perjudica a ti, mina tu moral. Si realmente lo deseas, te recomiendo que lo dividas en partes, en objetivos más pequeños y asequibles. Por ejemplo: Si quieres perder 30 Kg, plantéate primero perder 5 ó 10 Kg.
- Relevante: Debe ser motivador. Cada día cuando te levantes tiene que pensar: “Ya estoy más cerca. ¡Venga, a por ello!”
- Tiempo: Tienes que establecer un periodo concreto en este caso hablamos de 100 días.
4. Divide y vencerás. Una vez tenemos nuestro objetivo identificado, con todas las partes claramente definidas (SMART), vamos a dividirlo, vamos ha partirlo en subjetivos, en 4 ó 5, no más.
Los subobjetivos unidades más manejables y fáciles de atacar. Además te permitirán avanzar por diferentes flancos. Por ejemplo: Si tu objetivo es conseguir trabajo, tus subobjetivos pueden ser: Mejorar tu currículum, apuntarte a redes sociales profesionales (networking) y refrescar tus conocimientos de inglés.
5. Acciones concretas Cada subobjetivo lo desglosamos en 4 ó 5 tareas, acciones concretas que podemos hacer. Para cada una de estas tareas anota la fecha en que vas a realizarla y búscate un socio que te ayude. Siempre es más fácil hacer algo con alguien al lado.
Por ejemplo: Si quieres perder 10 kg., uno de tus subobjetivos será hacer ejercicio, seguro que algún amigo tuyo está desenado que lo invites a ir a caminar o correr.
6. Revisión diaria
Antes de irte a dormir cada noche repasa tu lista de subobjetivos y acciones, actualizala y pregúntate: “¿He hecho hoy todo lo posible por conseguir mi objetivo?”. Si la respuesta es sí, hoy estás más cerca que ayer de lograrlo, estás por el buen camino y seguro que lo conseguirás. En caso contrario, si respondiste “No”, ves a dormir y descansa porque mañana va a ser un día largo. ¡Tendrás que intentar hacerlo lo mejor posible!
Imagen cortesía de emiliokuffer con licencia Creative Commons.