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Fuente: iStockPhoto
Después de haber montado varias empresas he elaborado un listado de aquellas cosas que haría y que no haría si tuviera que empezar de nuevo.
Seguro que no están todas las que son y seguro que en muchas volvería a fallar pero ¿quien dijo que emprender era fácil? ¿Es que prefieres no intentarlo y trabajar en el sueño de otro?
Me han salido cinco cosas que volvería a hacer y cuatro que no volvería a hacer, qué pena que no fueran diez y poder titularlo “Decálogo de lo que hacer y lo que no al montar una empresa”, lo dejaremos en nueve, allá va.
¿Qué volvería a hacer?
a) Volvería a intentar que mi pareja me apoyara como hoy lo hace. La mayor fan de coches.com es mi mujer, recuerdo perfectamente una vez que ella le dio una tarjeta a una persona que se compraba un coche. ¡Lo pensó antes que yo! Y es que he tenido cerca experiencias de parejas que en casa no lo veían y antes o después se acabó, la empresa o la relación.
b) Volvería a confiar en mi equipo y no repararía en gastos a la hora de contratar empleados. El mayor ROI en una empresa lo da la inversión en un equipo mejor que tu. Me volvería a rodear de gente magnífica, que en muchas cosas sabe más que yo. Les volvería a dejar que se equivocaran, que trabajaran solos.
c) Volvería a trabajar como un animal. No hay nada más reconfortante que trabajar por lo que uno sueña y aunque hay que saber dónde está el límite de cada uno, no hay que escatimar ni un minuto de dormir menos. ¡Eso si! ¡Hay muchas maneras de compatibilizar vida con trabajo! Que no todo en la vida es trabajar.
d) Volvería a trabajar mucho por ver si vuelvo a tener suerte. Picassodecía que “La inspiración existe pero te tiene que encontrar trabajando”. A la hora de montar empresas es lo mismo: Si no trabajas mucho no desees la suerte, será más difícil que te la encuentres.
e) Por último volvería a ser una hormiguita. No he tenido experiencia en que nos den un cerro de dinero y que desde ahí tratemos de hacer una empresa rentable. Siempre hemos reinvertido nuestros beneficios y quizá por el miedo a lo desconocido volvería a hacer lo mismo y no empezaría con una gran aportación inicial de mis socios. Iría mas lento pero me sentiría más seguro.
¿Y qué es lo que no volvería a hacer?
a) No volvería a montar empresas con familiares y amigos y si lo hiciera dejaría todo escrito antes. Cuando montas una empresa con un amigo o con un familiar tienes el mismo riesgo de pelearte que con cualquier otro socio pero con los amigos y con la familia no se juega, se tienen pocos y no se deben despilfarrar.
b) No pediría dinero a los famosos Friends, Fools or Family. Quizá por lo mismo que el punto anterior pero cuantos menos negocios con familia, amigos o similares mejor, porque si encima se mezcla el dinero, las posibilidades de problemas aumentan.
c) No volvería a montar empresas con gente con mi perfil, me plantearía incluso si quiero socios para algo. ¿Puedo montar la empresa solo? El miedo a emprender te hace unirte con gente que no te complementa sino que tiene tu mismo perfil y conviene preguntarte ¿puedes montar una empresa solo y luego pagar el resto de puestos que complementen tu conocimiento? ¿No? Puede únete con esos perfiles que no sean como tú, que no sepan lo mismo que tú.
d) No dejaría de despedir a tiempo. No hay que equivocar dar oportunidades con montar un consultorio o una ONG. Puede sonar duro pero tendemos a pensar en dar segundas, terceras o enésimas oportunidades no dándonos cuenta que si despedimos a alguien a tiempo siempre habrá otra persona que pueda ocupar el puesto y que pueda necesitarlo tanto como el que no lo merece.
Hasta aquí este decálogo incompleto de mi experiencia ¡que os sirva! Yo espero no volver a caer pero ya sabe que el hombre es el único animal que tropieza…
@I. Arrola - 15/10/2010 06:00h
