En Japón es popular la siguiente historia. 
Dos fabricantes de zapatos viajan al corazón de África en busca de mercado para sus productos. 
El primero, al poco tiempo, envía a su empresa un telegrama con el siguiente texto: 
"No hay ninguna posibilidad de que aquí vendamos nada. Los nativos andan descalzos". 
El segundo telegrafía a su empresa el siguiente texto: 
"El futuro de la venta de calzado en la zona no puede ser más prometedor. Podemos dominar el mercado. Aquí todo el mundo anda descalzo".